Las almohadas de GEL proporcionan un soporte firme y suave: se adaptan a la forma de la cabeza y del cuello, lo que ayuda a mantener la columna vertebral alineada durante el sueño.
Reducen la presion: ayuda a reducir la presion sobre los puntos de presion del cuerpo, especialmente en los hombros, el cuello y la cabeza. Esto puede aliviar el dolor y la incomodidad en estas áreas.
Son frescas: el gel es un material fresco que ayuda a disipar el calor, lo que puede ser especialmente útil para las personas que sudan mucho durante la noche.
Son hipoalergénicas está hecha de materiales hipoalergénicos, lo que la hace ideal para personas con alergias o sensibilidades.
Duraderas: suelen durar más que las almohadas de plumas o algodón. Además, no perderán su forma.